Los alfares del municipio de Candelaria fueron de los más significativos de Canarias, tanto por el número de mujeres dedicadas al oficio, cómo por la calidad que alcanzó su producción; ésta llegó a exportarse además de las otras islas hacia la península ibérica, e incluso hacia América. Atendiendo a la funcionalidad de los recipientes, existen cuatro tipos: los del agua, fuego, de ajuar y finalmente los juguetes.